Moción: Reconociendo la intención de nuestros padres.

Manos de padres agarrando pies de un bebe

Todo padre y/o madre que ame a sus hijos ha hecho lo mejor posible para educarlos, con las herramientas a su disposición y basados en sus creencias y conocimientos. Esto no significa que no hayan cometido errores o que no hayan podido hacer las cosas diferentes, pero si que lo hicieron con las mejores intenciones.

Muchas veces sin embargo parece que olvidamos este principio y nos peleamos con nuestros padres por la forma en que nos educaron. Ya sea que nos hayan enseñado poco o mucho, que nos hayan dado todo o nada, que nos hayan reprimido con correa o con palabras de amor, o que hayan estado presentes mucho o poco tiempo, siempre los hijos nos quejaremos por cualquier cosa que se hizo o se dijo, o que se dejo de hacer o decir.

La invitación por lo tanto es a recordar este principio. Podemos seguir discutiendo con nuestros padres, pero mientras lo hagamos reconociendo que lo hicieron con la mejor de las intenciones, pensando siempre que era lo mejor para nosotros, no hay motivo real para permanecer enojados.

Claro, hoy podemos pensar que lo que ellos consideraban era lo mejor para nosotros no lo era tanto, pero no lo sabían y no tenían cómo. Y lo mismo nos va a pasar a los nuevos padres. Haremos lo mejor, los educaremos buscando lo mejor para ellos, pero seguramente nos equivocaremos y sólo con el pasar del tiempo sabremos si las decisiones que tomamos fueron las mejores o si pudimos hacer algo diferente.

Pero es que así es la vida. Cada decisión que tomamos lo hacemos convencidos de que será lo mejor, sin embargo, sea el resultado positivo o negativo, tampoco tenemos la opción de devolver el tiempo para probar la otra opción. Lo vivido, vivido está y no hay nada más que hacer que aceptarlo y aprovecharlo para tomar las nuevas decisiones.

Por lo tanto, ama y respeta a tus padres, agradéceles sus buenas intenciones y reconoce que hicieron lo que creyeron era lo mejor, te haya gustado o no y estés de acuerdo o no. Y educa a tus hijos de la misma forma, sabiendo que no eres perfecto, que te vas a equivocar pero reconociendo que lo haces con las mejores intenciones de acuerdo a tus capacidades.



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Moción: La perfección no existe.

Columna de piedras irregulares

La perfección, como mucho de los conceptos que usamos a diario, es relativa y por lo tanto no existe como tal. Lo que debemos entonces hacer cuando buscamos o queremos que algo sea perfecto es preguntarnos… ¿perfecto para quien?.

Con toda certeza mi pareja, familia y amigos no son perfectos, pero los considero perfectos para mi. Algunas de sus actitudes, comportamientos, opiniones o creencias las puedo considerar ideales o bastante distantes de serlo, pero no importa, porque así son y así los acepto, con lo que considero pueden ser sus fortalezas y sus oportunidades de mejora.

Sin embargo, lo que yo considero fortalezas u oportunidades de mejora puede que ellos mismos no lo consideren de esa forma. Por lo tanto, yo puedo querer ayudarlos indicándoles las cosas que pueden hacer diferente para ser “mejores” o para alcanzar la “perfección” en algún aspecto. No obstante, si ellos no buscan o desean ese tipo de “mejoramiento”, entonces debemos aprender a aceptarlo, sin insistir ni tratar de imponer nuestra realidad o idea de perfección.

Reconocer que la perfección es subjetiva, nos ayuda a entender que lo importante es buscar alcanzar nuestro ideal de perfección, no el de los demás. Si nos sentimos perfectos como somos, genial. Si sentimos que queremos cambiar, mejorar o transformarnos en algún aspecto para alcanzar nuestro ideal de perfección, maravilloso, empecemos. Sin embargo, nunca deberíamos hacerlo porque la sociedad o los medios nos dicen que así debemos ser porque ese es el estándar universal de la “perfección”.

Especialmente, porque al reconocer que la perfección no existe como tal, puede que hoy la sociedad nos imponga un paradigma, pero mañana lo más probable es que el modelo cambie y debamos nuevamente cambiar para mantener esa “perfección”. De esta forma, nunca nos sentiremos realmente satisfechos con nosotros mismos.

Los invito entonces a buscar ser la mejor versión de ustedes mismos, no porque los demás así lo exijan sino porque ustedes así lo sienten, recordando que lo importante es sentirnos que somos perfectos según nuestro propio criterio. Y en cuanto a los demás, es fundamental aceptarlos como son, reconociendo que puede que no sean “perfectos” según nuestro estándar, pero que pueden serlo según sus propios estándares. Eso ya los hace perfectos.



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Moción: Mociones de vida para mi hijo.

Fotos de mi hijo Francisco

Cuando empecé con la idea de compartir mis mociones, con el objetivo de movilizar a personas y organizaciones a construir un mundo viable y mejor para todos, lo hacía con la esperanza de que las nuevas generaciones no fuesen las últimas. Sin embargo, ahora que tengo un hijo, siento que mis mociones tienen una funcionalidad adicional.

Este nuevo uso tiene como objetivo dejarle a mi hijo un diario vivo y dinámico sobre quién soy, cómo pienso y actúo y sobre cómo pretendo hacer que el mundo en el que vivirá sea el mejor posible.   

Lo anterior surgió de la reflexión sobre lo poco, nada o mucho que conocemos a nuestros padres. Si somos afortunados, tendremos la oportunidad de contar con ellos durante un largo periodo de nuestras vidas y podremos experimentar en vivo y en directo sus creencias, pensamientos y forma de actuar, frente a muchos escenarios. Si no somos tan afortunados y no pudimos conocerlos, o sólo pudimos compartir con ellos poco tiempo de vida, es probable que con el tiempo se nos olviden los momentos compartidos y sus enseñanzas.

No obstante, cualquiera que sea el escenario, lo más probable es que desconozcamos facetas, ideas o pensamientos de nuestros padres; o que se nos olviden algunas, o todas ellas, por el simple paso del tiempo.

Por lo tanto, ahora sueño que estas mociones puedan perdurar por siempre, o al menos durante toda la vida de mi hijo, para que pueda recurrir a ellas en cualquier momento y revivir así mis pensamientos, esté yo presente un largo o corto periodo en su vida.

Así pues, el objetivo de siempre es que aquellos que leen estas mociones se movilicen a construir el mejor mundo posible para que nosotros y las nuevas generaciones podamos vivir a plenitud, en paz y felicidad. Y, el objetivo con esta moción, es que los padres aprovechen para dejarle el mejor legado posible a sus hijos a través de su amor, sus enseñanzas y el tiempo compartido.

Con amor, para todas las generaciones futuras.



Moción: 1er mandamiento humano: “respetar a todos los seres vivos”.

Apretón de manos con mensajes de respeto en inglés

Escribir estas mociones me ha llevado a tener un enfoque cada vez más humanista, depositando mi confianza en que algún día reconoceremos que todos somos humanos, independientemente de nuestras diferencias, y que todos vivimos en este planeta llamado “Tierra”, que no tiene reemplazo por ahora.

Por lo tanto, si bien respeto y admiro profundamente a aquellos que creen en un dios y depositan su fe en él, mi invitación más humana es a creer en nosotros mismos y a depositar nuestra confianza en nosotros, pues son nuestros pensamientos y acciones los que definen nuestra realidad.

Por consiguiente, quiero invitarlos hoy a que rijamos nuestros pensamientos y acciones bajo el que considero debería ser el primer mandamiento humano: “Respetar a todos los seres vivos”. Sólo a través del respeto a los demás, y al planeta en general, seremos capaces de poder vivir felices, en paz y garantizando nuestra subsistencia.

El respeto no exige que nos amemos los unos a los otros, pero si que reconozcamos el valor del otro. Independientemente de si el otro es mi victimario, mi oponente o mi diferente, todos merecen un trato digno y respetuoso. Igualmente pasa con el planeta, pues independientemente de que ciertos animales o plantas me parezcan lindos, miedosos o amenazantes, todos tienen valor para garantizar la coexistencia.

Así como acabar con las abejas o tiburones, por el miedo a que nos piquen o nos muerdan, traería graves consecuencias para el planeta y para nosotros mismos, de igual forma considerar acabar con los que son o piensan diferente a nosotros sería acabar con nuestra propia humanidad.

De forma similar, el respeto no implica que no haya conflictos, pero si nos ayuda a regularlos. Podemos pelear o discutir todo lo que queramos, podemos incluso odiarnos, pero siempre con respeto, dignidad y valorando la vida de los demás.

Y tampoco implica que no podamos “usarnos”. Todos dependemos de las plantas, los animales y de otros seres humanos para vivir, así que nos usamos mutuamente para garantizar nuestra supervivencia o nuestros deseos. Pero este “usarnos” no implica maldad, egoísmo, explotación o exterminio, implica un trato respetuoso, reconociendo la dignidad y el valor de la vida de todos los seres vivos.

Los invito nuevamente a que el respeto por todos los seres vivos sea el mandamiento que determine nuestro pensar y actuar diario, para poder construir un mundo viable y mejor para todos.

Y los invito a que me compartan si consideran que deberían existir otros mandamientos humanos y cuáles serían.



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Moción: Los cuatro niveles de la actitud frente a la vida.

Los 4 niveles de la actitud

En la vida los seres humanos no tenemos control sobre muchas cosas que nos pasan, pero sobre lo que sí tenemos control es sobre la forma en que reaccionamos a ellas. Esa es la actitud con la que afrontamos la vida. Y, según algunos expertos, hay cuatro niveles de la actitud a nivel profesional que en esta ocasión quisiera adaptarla a nivel general:

Nivel 1: Odiar la vida. Las personas que tienen este nivel de actitud odian todo lo que hacen y todo lo que sucede les genera insatisfacción. Por lo tanto se quejan constantemente de cualquier cosa y culpan al mundo y a los demás de sus desgracias. Malo si llueve y malo si sale el sol.

Nivel 2: Aceptar la vida. Quienes tienen este nivel de actitud tienden a conformarse con lo que hacen y con lo que les sucede en la vida.  Viven en resignación o indiferencia. La vida simplemente les pasa, sin que ellos tengan control. Se alegran por lo bueno y se enojan por lo malo.

Nivel 3: Amar la vida. Las personas con este nivel de actitud abrazan la vida y aman lo que hacen y todo lo que les sucede. Puede que su vida o su trabajo no sea lo que sueñan, pero aún así, la aceptan y la afrontan con amor. Son aquellos que son felices haciendo cualquier cosa o independientemente de las situaciones que vivan. Bueno si llueve y bueno si sale el sol.

Nivel 4: Generar la vida. Aquellos que tienen esta actitud frente a la vida sienten que han encontrado un propósito más allá de ellos mismos y trabajan para preservar y mejorar la calidad de vida de los demás. Se hacen responsables no sólo de sus vidas, sino de la de los demás. La vida no es algo que sólo sucede, es algo que se genera y se construye diariamente.

Por consiguiente, los dos primeros niveles sueles considerarse reactivos y pasivos debido a que la persona no tiene control sobre lo que hace o sobre lo que le sucede y sencillamente reacciona a los estímulos externos. Los dos últimos niveles se consideran proactivos, porque la persona es un protagonista activo que crea y define su realidad.

¿Cuál es tu actitud frente a la vida?



Moción: La vida es de segundos.

Relojes formando un rostro humano

Hace unos días, una persona que considero un gran ejemplo del poder humano, de la voluntad y la actitud frente a la vida, mencionó en una charla que “la vida es de segundos”.  

Esto me recordó que los seres humanos tendemos a vivir angustiados por lo que hicimos o dejamos de hacer en el pasado, o preocupados por lo que haremos en el futuro, y nos olvidamos muchas veces de vivir el presente, al máximo, olvidando este gran principio de que la vida es de segundos.

Un bebé al que le falten unos pocos segundos de aire al nacer puede tener severas complicaciones para el resto de su vida; una persona que tenga un micro-sueño conduciendo puede afectar profundamente su vida y la de los demás que se encuentren a su alrededor; y un descuido de segundos realizando cualquier actividad de riesgo puede tener graves repercusiones.

Pero no sólo es para lo malo. Mirar a otra persona, en el segundo adecuado, puede hacer que nos enamoremos; estar presente en el segundo en que un bebé empieza a gatear, caminar o cuando dice su primera palabra es invaluable; y perder una oportunidad por segundos puede generar nuevas y mejores oportunidades en los segundos siguientes.

Por lo tanto, la vida sucede un segundo a la vez y cada decisión o acción que tomemos puede transformar nuestras vidas. Es por eso que es tan importante vivir el presente, soltar el pasado y despreocuparnos por el futuro, pues sólo en el presente es que tenemos posibilidades de transformar nuestra realidad.

No esperemos para decirle a las personas que amamos, lo mucho que las amamos; no pensemos en ser felices en el futuro cuando algo puntual suceda, seamos felices hoy; no confiemos en el futuro para ayudar a otros, ser amables, pedir perdón, o disculparnos, es mejor aprovechar el momento y hacerlo ahora.

Un mundo viable y mejor para todos no se construye mañana, se construye hoy, con cada acción y decisión que tomamos, pues la vida es de segundos.

Para finalizar, los invito a compartirme cómo la vida les ha cambiado en cuestión de segundos.



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Moción: codificando nuestra realidad

Mujer con código proyectado

En estos días he estado investigando sobre lenguajes de programación y me he llevado una grata sorpresa al ver cómo funcionan para poder crear software, videojuegos, páginas web, aplicaciones y demás. Obviamente son una réplica de la forma en que nosotros mismos construimos nuestra realidad a través de nuestro lenguaje, pero no obstante, creo que nos permite mirarnos a nosotros mismos desde otra perspectiva y aprender un poco de ellos.

Lo primero es que cada comando tiene un propósito. Cada afirmación que se escribe para codificar tiene un objetivo claro. En teoría nuestra comunicación funciona igual, cada afirmación o cada información que compartimos tiene un propósito, pero desafortunadamente nos olvidamos de esto. Nos comunicamos de forma automática, replicando viejos códigos, sin pensar en qué queremos lograr. Por lo tanto, para mejorar nuestra realidad, debemos hacer que cada comunicación tenga un objetivo.

Lo segundo es que el código se entrelaza por capas o niveles, respetando la jerarquía.  Por lo tanto, uno puede querer cambiar algo en un nivel, pero si otro nivel tiene más jerarquía, entonces los cambios no suceden como uno quiere. En la vida creo que es igual, muchas veces nos preguntamos por qué las cosas no pasan como deseamos y es probablemente porque estamos abordando la causa del problema donde no está. Debemos ir más profundo para atacar el aspecto con mayor jerarquía para lograr nuestras metas.

Por ejemplo, creo que hay personas que fuman, comen o beben por gusto o como resultado de otro problema como la ansiedad. En el caso de hacerlo por gusto, creo que muchas personas logran dejar de fumar, beber o comer inadecuadamente cuando reconocen que es un problema para su salud. Sin embargo, en el caso de los problemas de fondo, si las personas se centran en dejar de fumar, pero no en atacar la ansiedad, entonces puede que dejen de fumar, pero ahora empezarán a comer pues el código principal permanece.

Y tercero, cuando el código está muy denso, es cada vez más complicado editarlo para que haga lo que realmente queremos. Un cambio en un lado puede tener repercusiones en otro lado inesperado. Lo mismo creo que nos pasa a nosotros mismos. Nos hemos ido llenando de juicios, valores, creencias y códigos que ya ni siquiera sabemos que están ahí, pero que dictan nuestro comportamiento. Por eso es importante hacer una limpieza del código de vez en cuando. Es importante reflexionar sobre nosotros mismos para detectar que nos limita y así buscar la forma de eliminar esa limitante o de modificarla.

Espero estos tres aprendizajes (comunicar con propósito, buscar las causas raíces y depurar lo que sobra o no sirve) te ayude a codificar una mejor realidad para ti y los tuyos. Recuerda que la realidad es el resultado de nuestras propias historias, de nuestro código interno.


También se puede ver la moción en YouTube:


*Imagen de ThisIsEngineering en Pexels

Moción: Cobra Kai – La serie

Cobra Kai

He de aceptar que por algún tiempo me resistí a ver la serie de Netflix denominada “Cobra Kai” por pensar que sería una mala adaptación de las películas de “Karate kid”. Sin embargo tengo que reconocer que la serie me ha gustado, especialmente por la forma en que manejan la relación entre Johnny Lawrence y Daniel LaRusso, porque demuestran que la realidad es subjetiva y que sólo enfocándonos en las cosas que nos unen podemos construir relaciones positivas

Por un lado, la serie muestra otra faceta de Johnny Lawrence. El abusador de la película original se ha convertido en un “perdedor” sin propósito tras su encuentro con Daniel LaRusso. En este contexto, Johnny pasó de victimario a victima, convenciéndose a sí mismo que su fracaso es responsabilidad de LaRusso, negando su propia responsabilidad.

Por otro lado, Daniel se ha transformado en un hombre de negocios exitoso. En esta nueva faceta, parece haber olvidado sus orígenes humildes y de alguna forma se ha convertido en una persona que por creer estar en lo correcto, termina imponiendo su realidad, afectando a las demás personas. Es decir que Daniel sin darse cuenta ha pasado de ser víctima a victimario.

Por lo tanto, este sólo elemento ya hace interesante la serie porque nos demuestra que no hay bueno y malo, no hay victima y victimario, no hay correcto o incorrecto, pues todos estos conceptos no son más que construcciones mentales y sociales que hemos construido basados en nuestras experiencias previas. Es por esto que ambos se ven como enemigos y tienen problemas para entenderse.

Este aspecto de la relación introduce el segundo elemento que me llamó la atención. Y es que las pocas veces en que se olvidan que son enemigos, parece que encuentran que comparten mucho en común y que podrían ser grandes amigos. Sin embargo, siempre hay algún detonante que los convierte nuevamente en enemigos.

Lo importante es que estos enemigos jurados de vez en cuando olvidan sus rencores y se convierten en grandes amigos. Esto sucede porque dejan de enfocarse en las cosas que los separan y se concentran en las cosas que tienen en común. Si esto lo hiciéramos todos, nos daríamos cuentan que aún entre los mal llamados “enemigos”, hay muchos aspectos sobre los que se puede construir.

En conclusión, dejo a cada quien su interpretación sobre la serie, pero invito a todos a reconocer que nuestra verdad no siempre es la realidad de los demás, y que aún entre personas con intereses opuestos, hay aspectos sobre los que podemos construir conjuntamente.


Pueden ver la moción en YouTube:


*Foto: Cobra Kai – Netflix

Moción: simplemente jie.

La vida, por larga que sea, es muy corta. Hoy estamos aquí, tenemos la fortuna de disfrutar la vida, de experimentar las maravillas de este planeta y de compartir momentos con familiares y amigos, pero nada garantiza que mañana vaya a ser igual. La muerte siempre llega por sorpresa, así la estemos esperando, y aunque no sabemos si hay una vida diferente después de la muerte, lo que si sabemos es lo que pasa con los que continúan viviendo.

Un día como hoy, hace 10 años, la muerte se llevó a uno de mis mejores amigos, pero su legado vivirá por siempre en el corazón de las personas que tuvimos la fortuna de conocerlo. Si bien no dejó nada tangible, más allá de fotos, si dejó en nosotros una huella imborrable mientras vivió, simplemente porque vivió a plenitud, disfrutando cada placer que la vida tenía por ofrecerle, mostrándose como era y haciendo amigos por doquier.

Su impacto fue tan positivo en nuestras vidas que su recuerdo siempre está presente, sacándonos una sonrisa cada vez que recordamos alguna de sus anécdotas, expresiones o momentos compartidos. Es por eso que considero que una vida bien vivida no termina con la muerte, termina sólo cuando los demás dejan de recordarnos con amor, alegría y emoción.

Mencionado lo anterior, te invito a reflexionar sobre cómo estás viviendo tu vida, sobre la huella o el legado que estás dejando en las personas que te conocen y sobre qué pasaría si la muerte llegara a visitarte hoy. ¿Morirías pleno y satisfecho con tu vida o morirías con remordimientos?. ¿Te recordarán con amor profundo en el corazón o serás un vago recuerdo en las personas que te rodean?

Si tus respuestas te satisfacen, maravilloso, sigue disfrutando tu vida y construyendo un legado emocional eterno en quienes te conocen. De lo contrario, espero que empieces a hacer cambios hoy mismo. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. Disfruta la vida al máximo, construye relaciones sólidas y duraderas, no pierdas el tiempo haciendo enemigos o posponiendo la vida, pues nada ni nadie te garantiza que el mañana llegará.

Ojalá, cuando la muerte nos llegue a todos, podamos decirle de frente “Simplemente jie”, manifestando que vivimos a plenitud, que nos vamos sin remordimientos y que aceptamos que la muerte simplemente nos llega a todos, pero sonreímos porque sabemos que nuestro legado será eterno.

A mi amigo, mi hermano… simplemente jie.


Puedes también ver la moción en video: