Moción: Free guy (Película)

Poster de Free Guy

En días pasado me vi la película “Free guy, tomando el control” y me nació hacer una moción sobre un aspecto en particular: En el juego de la vida, ¿consideramos a todos los humanos como jugadores o consideramos que ciertas diferencias hacen que en nuestra vida haya jugadores y personajes no jugadores?.

Para que me entiendan mejor, en ciertos videojuegos existen los jugadores, personas que crean un “avatar” para existir en el mundo del videojuego, y existen los personajes no jugadores (NPC por sus siglas en inglés) que son los personajes creados por el videojuego para dar pistas, rellenar el espacio o para ser objetivos de las misiones, entre otras funciones. En general, los jugadores son los personajes importantes, reales y que evolucionan, y los NPC son irrelevantes, más allá de su funcionalidad, pues independientemente de lo que les pase, siempre permanecen inmutables.

Si esta situación la extrapoláramos a nuestra vida… ¿quiénes serían los jugadores y quienes los NPC?. Creo que la gran mayoría de las personas trata a los “suyos” como los jugadores y al resto del mundo como personajes no jugadores. Por lo tanto, como sólo logramos interactuar a profundidad con un pequeño número de personas cercanas a nosotros (familiares, amigos y conocidos), tendemos sólo a considerar a estas personas como los jugadores. Nos preocupa lo que les pasa y estamos atentos a su evolución. En resto del mundo es paisaje, son personajes no jugadores, por lo tanto no nos preocupamos tanto por ellos ni estamos atentos a su evolución.

Lo anterior es algo que considero normal, más no significa que esté bien, pues sin darnos cuenta nos va dividiendo y hace que tratemos a las personas de forma diferente. Por lo tanto, juzgo y trato a los míos de una forma y al resto de otra forma. Tiene prioridad lo que me afecta a mi y a los míos, y todo lo demás ya no es prioritario.  

Es por esto que algunas veces podemos percibir cómo algunas personas emiten juicios como “deberían matar a todos los criminales”, pero cuando algunos de los suyos entra en esa categoría, entonces ahí si “los criminales también tienen derechos y deben recibir un trato justo”.

Por consiguiente, la invitación como siempre es a respetar a todos y valorar sus vidas por igual. Independientemente si son familiares, amigos, conocidos o completos extraños, todos los humanos somos jugadores en este juego de la vida y por lo tanto no debemos tratar a nadie como un personajes no jugador cuya vida valga menos que la nuestra.


Moción en video:


Moción: Tips de viabilidad – Parte 2

Tip 2: Todas las vidas tienen el mismo valor.

Si estamos de acuerdo con el tip anterior y reconocemos que todas las realidades son válidas porque no hay una realidad objetiva universal, entonces debemos aceptar que todas las personas tienen el mismo valor, independientemente de su raza, género, creencia, posición económica, ideología, país de origen e incluso estados mentales.

Nadie puede estar por encima de nadie para poder decidir quitarle la vida. Aceptar y permitir lo anterior es legitimizar la violencia y no reconocer que todas las vidas tienen el mismo valor. Matar por necesidad, venganza, creencia o cualquier otro motivo debe estar descartado de ante mano si queremos hacer de este mundo, un mundo viable para todos. Si no lo hacemos, estaríamos creando un mundo viable sólo para los que son o piensan como yo.

Necesitamos erradicar pensamientos como los siguientes: “A este asesino y violador deberían darle la pena de muerte”, “Si alguien ingresa a robarme a la casa, yo lo mato”, “A esos guerrilleros y paramilitares deberían bombardearlos”, “Si perdemos el partido, vamos y matamos algunos hinchas”, “A esos drogadictos indigentes deberían matarlos”, “Todos esos que no creen en nuestro Dios deberían suicidarse”, “A los infectados deberían asilarlos y matarlos”, entre otros.

Porque en todos esos pensamiento precisamente evidenciamos que mi vida, mi realidad, mi situación está por encima de “otros” que a mi parecer deberían no existir o vivir, debido a que su vida tiene menor valor que la mía. Y el problema es, por un lado, que la historia da muchas vueltas y hoy podemos estar en un lado de la historia, pero mañana podríamos estar en el otro lado y ser las personas “descartables”, y por el otro, que si realmente queremos un mundo viable para todos, necesitamos a todos, sin excepciones, pues cada uno puede aportar su realidad.

Esto no significa que no debamos hacer nada frente a las cosas que consideramos malas o perjudiciales para nosotros y los demás, por el contrario, significa que tenemos un largo camino para llegar a soluciones incluyentes que aporten a la viabilidad de todos en el planeta, sin excepciones, porque reconocemos el valor de todas las personas que habitan en La Tierra.

¿Alguna vez has tenido alguno de estos pensamientos o similares? Lo más probable es que sí (Esto no te hace una mala persona), no obstante lo importante es no reaccionar instintivamente, sino tomar una pausa y pensar en mejores soluciones que respeten el valor de todas las vidas.

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